Me quedaré SOLO ?

Estoy en unos días especiales, en tanto que de extraños, parecen que no me estén sucediendo a mí, a ese cáncer lunático que no hace más que buscar el equilibrio, eso que todos hemos creído tener alguna vez. Demasiados acontecimientos para tan poco tiempo, así que he podido meditar poco, pero lo suficiente.

Hoy me despido, apenas conservaré mis correos unos días aquí en este medio, tal vez en dos o tres días desaparezcan, y todo volverá a ser como era.

Esta solución surge de argumentar varias preguntas que me han saltado de pronto a la cara, preguntas que todos queremos obviar, preguntas que solo en los momentos bajos tenemos, preguntas que surgen en los días previos a la regla, porque sí, los hombres también tenemos la regla, tal vez solo mental, pero también tenemos derecho a tener dos o tres días sensibles, a lo mejor hasta ovulamos y todavía no ha aparecido el científico que lo haya descubierto…

La cuestión es que alguien se preguntó o se dijo a sí misma, que no quería “quedarse solo”, pues esa es la cuestión. Sí, algo que todos miramos de lado, tal vez con recelo, algunos se atreven a encararlo, otros cogen pánico cuando piensan y toman decisiones, tal vez forzadas por la ansiedad, y se lanzan a relaciones imposibles, relaciones que fracasaron y que ahora quieren retomar sin más, pero es posiblemente un gran error, porque siempre surge lo mismo, el dolor, el que se puede tener, y el peor, el que se puede provocar. Por eso me lo he planteado tranquilamente.

Era tal vez el momento, tal vez porque ahora es cuando más me valoro, los conceptos que son mi entorno, me lo confirman. Éxito laboral, salud, amistad, una gran satisfacción personal, entrega familiar, muchos pequeños detalles que te van complementando, pero todo eso se esfuma cuando te ocupas en pensar más allá, en pensar en un día que tal vez llegará, en un día en el que tendrás ganas de salir corriendo, sin saber a donde, simplemente te surgirá la ansiedad, por tal vez no ver un futuro claro, por tal vez no haber tomado las decisiones que debías tomar, o por tal vez darte cuenta de la dureza y crueldad del asunto, estás solo, y lo vas a seguir estando.

No quiero que llegue ese día y tomar las decisiones precipitadamente, y alocadamente, por eso ahora, y con mucha calma tomo las riendas de mi futuro, un futuro que alejo de loquo, pero sin maldad, ni rencor. Atrás quedan personas fantásticas, personas que algunas seguirán formando parte de mi futuro, otras a las que tengo que agradecerles tantas cosas, no sé, un cómputo general positivo, pero destacar a S. por haber comenzado ese blog que ahora muere, a A. por haberme abierto los ojos, a I. por haber saltado las reglas y contestar, a M. por aparecer y desaparecer, en definitiva gracias a todos.

Mi decisión es sencilla. Me lanzo a buscar lo que quiero encontrar, y no es otra cosa que alguien que me provoque lo que necesito sentir, y no surgirá de estas líneas, porque todos podéis daros cuenta de que me es fácil expresarme con la retórica, por eso no quiero cometer errores pasados, al contrario, quiero tomar la primera decisión, decir adiós a este medio, sin más, me refiero a Internet. Vivir la vida física, vale ya de escudarme en un pseudo, un pseudo que me ha protegido y me ha servido de barrera.

Ahora tal vez me atreva a mirar más a los ojos, tal vez busque esa mirada larga, sincera, llena de intensidad, y tal vez me atreva a preguntarte tu nombre. Tal vez ahora sea capaz de prepararme, tal vez comprenda lo maravilloso que da la realidad, el contacto, el sonido, el olor, el ambiente, todo eso que aquí se pierde, que todos imaginamos, pero que nadie escucha. Mi voz, me han dicho muchas veces que mi voz suena bien, muy bien, y lo sé, no es egoísmo ni prepotencia, es real, y eso no es más que confirmar que la realidad supera a la fantasía que vivimos en este medio.

Sé que es de largo un mail extenso, por eso si habéis llegado hasta estas líneas, algunos os hayáis sentido reflejados, o reflejadas. No he pretendido herir a nadie, ni pretendo que nadie tenga que tomar decisiones, solo quiero comentar en voz alta, que hay momentos en los que debemos ser nosotros mismos. Sentarnos en una silla o en el sofá, a solas, con poca luz, y repasar el momento, revivir lo mejor y lo peor, hacerte preguntas, y buscar respuestas.

El pasado no es más que eso, verdad V.? pues sí, del pasado solo debemos rescatar lo bueno, lo mejor que hayamos vivido, pero saber el porqué se tomaron decisiones, y es bueno que de vez en cuando la gente se sincere, sea realista y de la verdad como ese regalo que todos queremos tener, pero que nadie quiere escuchar, eso que duele tanto, el momento en que más oímos y menos queremos escuchar. A mí me ha llegado, ese momento y otros.

Os saludo, os hablo y os digo Adios, como a mí más me gusta …AGUR….