lunes, 6 de junio de 2011

Rubías hay muchas... pero ... ( I )


Es cierto, el dicho de "tiran más dos tetas, que dos carretas..."... jajaja... vaya que si es cierto, tanto que andamos, ahí, dos mulos tirando de la carreta, y vaya dos mulos.

La historia tiene su miga, espero desgranarla con ese punto de alegría, hironía, sonrisas, alguna lágrima y algún momento especial...


Todo comenzó hace ahora un año. Anabel tiene su grupo de teatro, y justamente hace un año, aproximadamente, tuvimos la suerte de disfrutar de una representación del grupo "Això no és vida", traducido, "Esto no es vida"...

En aquella ocasión, mi trabajo se redujo al mínimo, jejeje... disfrutar, es decir, entrar puntual, sentarme, ver la obra, aplaudir, y luego felicitar al grupo entero, y como no, a Anabel.

Pero el tiempo pasó, y no hubo ningún bolo más.

Este año retomaron la idea de volver a estrenar, la misma obra, pero ya surgieron los problemas, una de las actrices había cambiado de residencia, y sí, se nos había ido, la más joven, y la verdad, la que clavó el papel, tal vez porque era un poco bastante "natural" en ella, ya os iré contando quien es quien en la obra.

Así que se adentraron en la dura tarea de buscar la nueva actriz.





Todo el desarrollo que sigue es resumido en una frase..."comienzan las reuniones". Sí, el grupo tenía forma una vez más, ya habían encontrado a la chica, y las tardes y los mediodías, que podían, se juntaban para volver a repasar y retomar el hilo.

Hasta ahí, cap problema, jajajaja, ningún problema. Era lo mismo que el año pasado.

Pero. Siempre hay un "Pero". Esta vez Anabel hurdió una estrategia que no tenía error, aunque sí lo tenía, pero una vez más, triunfaron las "dos tetas", y no os molestéis, no, sabeís que el hecho de aducir a tan preciado y deseado concepto, no es cual si no, un canto al poder femenino hacia para el hombre, ya que cada vez que lo deseaís, somos vuestros susodichos sirvientes... jajajajaja.. más quisiérais, jajaja... hay hombres que no sucumbimos fácilmente, jajajaja...

La estrategia era abaratar costes en la obra, ya que esta vez, se realizaba el estreno en domingo, y eso conllevaba un gasto adicional, y está bien lo de teatro amateur, pero lo de "teatro que me cuesta una pasta", como que no.

Llegado al punto de colaboraciones, como ellas lo llaman, se fueron solucionando los conceptos, pero había uno que no tenía destino... "EL FOCO"... jajajaja... sí, esa cosa que se usa en las obras de teatro para que la gente preste la atención al punto donde se desea que la preste...




Anabel nos enredó, a los dos que decía antes que tiraban del carro... jejeje... el que escribe, y su mejor amigo, Carlitos, un hombre de un poco más de cien kilitos, y más de metro setenta y ocho, un tanque, una persona excepcional, tanto que a pesar de presentarlo como Carlos, siempre, la gente acaba llamándolo Carlitos... y como no, esta vez fue el mayor enredado, ya que ante la petición de ayuda de Anabel, recibió un no mío, no un "NO" rotundo, pero sí parte negativa hacia sus deseos... pero Carlitos sucumbió con un silencio, y ya sabemos, para las mujeres pueden tener muchos significados los silencios, pero siempre, siempre, siempre, tendrán el significado que mejor les vaya... jajajaja... y esta vez, el silencio era un rotundo e indudable "SI"...

Ahí empezó la historia... dos animalicos, dos hombretones, dos personas casi seguras de si mismas, se encontraron de pronto ante un reto, o un desafio, o ... que coño, las cosas por su nombre, no teníamos ni idea, ni puta idea de lo que se nos venía encima... porque ni una sola efímera situación parecida, se había hubicado en nuestras vidas...

A todo esto, y ante el paso del tiempo, Anabel siempre nos decía, "podeís poner en vuestros currículums que habeís llevado la iluminación en una obra de teatro..."... jejejeje... Carlitos seguía con su silencio, y yo no hacía más que poner en duda, que aquel argumento, nos abriera situaciones laborales futuras...




Así, pasaron los días... y por fin quedaban dos semanas para el estreno... pero eso lo dejo para el siguiente post...

Solo os adelanto que hubo de todo... bronca... nervios... más nervios... y...

2 comentarios:

JF dijo...

Leyendote me recuerda mis tiempos de estudiante, que en algun momento tome teatro como taller complementario de mis materias, habia un profesor italiano, medio loco el, y no por ti que me acuerde de el, no.

Si no que en los ensayos de las obras su pregunta al final era...


¿Se mete usted en el personaje o el personaje se la mete a usted?...

Nunca supe que responder.

Enhorabuena a se grupo de mujeres.

Un caluroso saludo.

JF dijo...

Error, error, error..

Mil perdones, en la frase del profesor, puse una letra en lugar de otra.

"¿Se mete usted en el personaje o el personaje se LE mete a usted?"...

Que asi sonaba medio raro.