martes, 8 de junio de 2010

2 Horas agónicas... ni a mi peor enemigo se lo deseo...


...este viaje ha sido muy interesante, muchísimo, sobre todo con las espectativas que había creadas, ya que se han sobrepasado...

Pero el otro día, hablaba de los finales de los viajes... ahí va uno... agarraos...

La tarde en Montecarlo es agradable, entre nublada y soleada, aunque a estas horas, las montañas empiezan a acercar más la penumbra, que la luz de un día naciente. Estamos un poco cansados, por no decir que muy cansados, ya que lo que parecía un paseo, nos ha derivado en horas y horas de caminata, pero ha valido la pena, hemos visto tanto, y disfrutado, que los ojos todavía nos transmiten que este viaje no ha durado dos días, apenas 48 horas. No, nos queda tanta información a procesar, lugares, sitios, rincones, gentes, tiendas...jejejeje... que parece que llevemos semanas por aquí.

Suerte que la cena ha sido reconstituyente, mucho, aunque el precio también ha aportado, más bien ha restado, pero quién no va a cenar un poco bien, y en un lugar tranquilo para una vez que estás en esta ciudad de tanto poder adquisitivo, aunque nadie se piense en algo desorbitado, ya que eso está fuera de nuestro alcance.

El casino, cercano ya en nuestros pasos, nos da una nueva imagen, iluminado, nos muestra unos colores maravillosos, más dignos y emblemáticos que los de la tarde al brillo del sol, con esas banderas que hondean, con un aire que se alza agradable, aunque Anabel anda tapada con su chaquetita, somos de temperaturas diferentes, jajaja... yo siempre tengo calor, y ella frío.

Decidimos que es hora de marchar, tal vez nos da tiempo a mirar un par de veces, cada uno a sus puntos, ella a unos mostradores de alguna marca de prestigio, como Cartier, Bulgari, Gucci... tantas hay por aquí !!... yo, a un último Ferrari que pasa con su música celestial por la calle.

Ya en el coche, que por cierto, aparcamos en Montecarlo y sin pagar ni parking ni nada, y super cerca del Gran Casino,, jajajaja.. qué gitanos somos !!! jajajaja... pue eso, que nos disponemos a coger la carretera. De pronto, veo una luz en el cuadro que es nueva, qué será ???

Me aparto, paro el coche, y quito el contacto. Lo vuelvo a poner, se encienden todas las luces, y arranco, la luz sigue encendida... ummm... abrimos su puerta y la cerramos, y luego la mía... todo sigue igual. De pronto se me ocurre que sea el maletero... nooooo... el maletero no, por Dios... miedo en el cuerpo, nos miramos, en nuestros rostros se refleja el miedo a ... haber sufrido un hurto o robo, o lo que sea... nuestras maletas !!!

Me dirijo hacia fuera, me quedo travado con el cinturón, los coches pasan lanzados a apenas unos centímetros, y noto como mi respiración sale por mi cuello... toco el portón, y sí, está abierto, no mal cerrado, si no abierto... lo alzo, no me atrevo a mirar... y sí, están las maletas. Me quedo tranquilo, y en mi rostro Anabel ve el éxito. Cierro , me dirijo al asiento y voy a arrancar, pero antes pienso en mi bolsito. No está. Vuelvo a bajar corriendo, abro el maletero, y no lo veo. Es un Fiat 500, es decir, el maletero es de el tamaño que dos maletas de mano, casi no caben. Las saco, y no lo veo... el mundo da vueltas, pienso rápido en que no podré volver... pero sí, ahí, en un rincón, lo diviso...

Por fin, y con los nervios todavía agarrotando la musculación del cuello, nos dirigimos hacia el aeropuerto de Niza. Hacemos bromas, para aliviar la tensión, diciendo que "quien iba a robar en un Fiat 500" con todos los coches que había en Montecarlo. Es cierto, qué tontos. Pero el cuerpo no dice lo mismo, ha sufrido estres.

Ya en la autopista, nos surge la duda, de si llenar ya el coche, o esperar, ya que hay que entregarlo bien lleno, y como es de nivel marcado por señal de volumen digital, tenemos miedo. Así que dejamos la operación para una gasolinera que hay justo en el complejo del aeropuerto, que tenemos marcada en un mapa que nos dieron, para saber donde dejar el coche de alquiler.

El resto del camino hasta las inmediaciones del aeropuerto es tranquilo, además vamos como a mi me gusta, con tiempo, con mucho tiempo. El vuelo salía a las 23:45, y eran las diez casi. Soy así, me gusta llegar holgado, aunque ya llevemos las tarjetas de embarque.

Por fin cogemos la salida, es fácil, apenas sin darnos cuenta estamos en el mismo aeropuerto, pero está cambiado. Recuerdo que llegamos el viernes a las once de la noche, que cogimos el coche de alquiler, y sin darnos cuenta, ya estábamos en la autopista A-8. Ahora, con más tiempo, descubro que el aeropuerto es enorme, con dos grandes terminales. No es que sea un gran, gran aeropuerto, pero es mucho mayor de lo que esperaba.

Llegamos a la primera rotonda. Bien, todo claro. Vemos la gasolinera de la marca TOTAL a nuestra izquierda, pero la vía es de sentido contrario al que necesitamos, así que después de dudar, y parecer guiris totales en la forma de conducir, que si acelero, que si freno, que si meto el coche, que si no, nos metemos sin querer en una zona en obras, como una entrada a un parking. Qué hacemos ?? Pues seguir, en esos momentos solo puedes seguir. El asfalto desaparece, se convierte en arena y baches, y estamos flipando.

Decidimos seguir, y de pronto, una entrada a una vía asfaltada, una especie de anillo que rodea el aeropuerto, y nos metemos. Llegamos a otra rotonda, y ya tensos, miramos y nos increpamos, pero con tranquilidad, sobre qué dirección coger... y acertamos, porque nada más girar el coche, aparece la gasolinera al fondo.

Entramos, las luces están encendidas... bien !!!... Paramos el coche, y ella, que es mi intérprete, porque habla bien francés, se dirige a la máquina. Vemos que es pre-pago, como no, y nos disponemos a probar a llenar, pero no, no sale ni gota. Total que nos dirigimos a la oficina, y la puerta está cerrada. Veo un chico haciendo cuentas. Miramos el reloj, y eran las diez menos 6 minutos. Cerraban a las diez, pero si él estaba haciendo cuentas... es que ya no habría más servicio.

Por megafonía y de una forma ininteligible, llegamos a entender, que hay dos surtidores, gestionados por tarjeta... Nos dirigimos a ellos, aparcamos el coche, y empezamos a comentar la jugada, porque el coche hay que dejarlo lleno, así que el método elegido, llenar con diez euros, y luego ver cuanto sube, así hasta llenar.

Metemos la tarjeta, y no la ve. Probamos con otra, y lo mismo... todas las tarjetas VISA y AMEX, pero nada... probamos en el otro surtidor, y mismo resultado... Ya empezamos a estar nerviosos, yo más, que me tenso. Anabel prueba, de una forma y de otra, pero no. A esto, se apagan las luces, y sale el chico. Nos ve apurados, y nos viene a echar una mano. Lo ha hecho varias veces. Prueba y nada, y lo que es peor, las pantallas se empiezan a quedar colgadas. Esto pinta mal.

Desistimos, y él nos comenta donde puede haber otra gasolinera cercana, que supuestamente cierra más tarde. En la entrada de Niza, en una zona con un nombre raro, pero raro. Total que salimos para allá, tensos, y más nerviosos.

Volvemos a dar la vuelta al aeropuerto, y por fin una rotonda... mil carteles, los nervios te hacen ver diez mil carteles, y las letras más pequeñas de lo que son. Por fin Anabel puede leer la dirección, porque era una de las maneras de ir a Nice como lo escriben ellos. Total que para allá vamos.

Después, lo típico, mil cruces, mil historias. Decido hacer una infracción, por estar ya un poco despistado, y de pronto aparece la gasolinera, está de BP. Pues lo mismo, cerrada, ni una luz. Uyyy, esto se complica.

Anabel me comenta que en Francia es complicado encontrar gasolineras abiertas. Total que vemos una autovía que iba hacia Grenoble, ya para allá que vamos. De pronto se convierte en carretera de doble sentido. Seguimos unos kilómetros. A todo esto, ya son las diez y veinte.

Encontramos otra gasolinera TOTAL, y mismo surtidor controlado por tarjeta... Tarjteta... qué tarjeta ?? nada, no acepta, no ve, o no genera, no sé cuantos mensajes nos aparecieron.

Solución... necesitamos una solución. La autopista, donde las gasolineras no duermen. Y para allá que vamos. Primera duda, dirección Mónaco, o Cannes ? Creo recordar que la primera noche, vi un "Aire" porque las áreas de servicio se llaman "Aire" que debe ser la traducción...

Entramos en la autopista. Peaje, otro peaje, y no aparece el área... nos lo habremos pasado? había área, o lo había soñado. De pronto un indicador a 6 kilómetros está... Por fin metemos el coche en la salida, y nuestros ojos buscan la luz desesperadamente. Sí. Abierta. Procedemos a llenar, pero hasta los topes, porque ya no sabía a cuantos kilómetros estábamos del aeropuerto, habíamos perdido la cuenta con los nervios. Eran la diez y media pasadas.

Pagamos, y claro, te das cuenta de que debes seguir por la autopista hasta la siguiente salida... que era Cannes !!!, por Dios... veinti pico kilómetros... la cogemos... casi en silencio, bueno, silencio roto por las indicaciones de Anabel. Hay que dar la vuelta, me meto por una especie de desvio, pero imposible... todo es un lío... por suerte podemos girar, y un cartel de "A-8"... salvados. Entramos otra vez en la autopista y dirección Nice...

En esos momentos, me giro, y le pregunto si ella está nerviosa... porque yo estaba como un tronco, rígido, tenso, duro, a punto de saltar y ponerme a llorar... cuanto estress!!!. Por suerte para mi, me contesta que ella está igual, eso me tranquiliza, porque me hace sentirme uno más.

Seguimos. Nos marca que el aeropuerto está a diez kilómetros. Miro la hora... y... flipando, las once menos diez de la noche... hago cálculos rápidos.. y creo que sí, que iremos tranquilos y dejaremos el coche y para... OSTIA !!!, que hay dos terminales, y donde se deja el coche es la terminal 2, y que hay que ir a la terminal 1... pero tranquilos, que hay un bus que pasa cada 5 minutos... nooo, que cuando llegamos, vi que a partir de las once pasaba cada 10 o 15 minutos... bufffffffff....

Por fin rotonda, y a dejar el coche. Aquí empezaba otra vez una aventura. Seguimos las indicaciones, que están en obra, por lo que no están iluminadas, pero entre el plano, la agudeza de Anabel, y mis gestos violentos con el coche... jajaja... conseguimos llegar a una entrada de un parking iluminado.

Una barrera. Qué hacemos? Acerco el coche poco a poco, y se levanta sola. Para adentro. Vemos unas indicaciones de una flecha para los coches de Hertz, Avis y no sé que otra compañía. Las seguimos, de pronto subimos a una planta, todo oscuro, pero atisbamos a seguir viendo las indicaciones... otra planta... más oscuro, vamos que no había ni una luz. Seguimos por esa planta, y de pronto no aparecen las indicaciones. Vemos como un pasillo, estrecho, muy estrecho, y nos metemos... una rampa... bajamos... y... no hay salida un callejón, un rincón... doy la vuelta como puedo, vuelvo al punto de arriba. Todo oscuro, cientos de coche, con pinta de ser de alquiler, todos impersonales, sin pegatinas que marquen la personalidad de su conductor, ni muñecos ni nada... volvemos a la dirección que teníamos antes de meternos por es hueco estrecho.

Vemos dos rampas, estás iluminadas, las cogemos, bajamos.. y... peor todavía, abajo había bastantes coches de alquiler pero caros... sin salida... damos la vuelta, volvemos a subir... y nada... hasta que al pasar, de pronto vemos en una pared que quedaba a nuestro lado, que había un cartel señalando el suelo, y que dejáramos allí las llaves.

Aparco, bueno, mejor dicho, dejo tirado el coche allí en medio... y me dirijo al buzón... nada de luz, ojo, nada de luz, y me encuentro a Anabel que me dice que un cajón no se abre, y que al lado hay una caja roja, llena de arena... aquello es ... no sé.. kafkiano... jajaja. Está claro que había que dejar la llave en aquel invento, con forma de buzón. Pero no hay ranura, no hay nada para poder dejarlo, solo una rendija ciega... buffff... pienso en dejar la llave allí mismo, encima, pero desisto, pienso en los 200 euros que hemos dejado en forma de franquicia... y sigo dándole vueltas al buzón.

Por fin veo que la rendija cede, y lo que hace, es abrirse desde dentro, y deja ver como una boca con dientes, en la que dejas la llave, así evitan que cojas las que hay debajo. Pongo la llave, cierro, y a por las maletas... Hacia donde vamos ???... nada de luz... salimos hacia un hueco, y de pronto vemos un camión de la basura... les preguntamos por la Navette, el bus que va de la terminal 2 a la 1, y nos dicen que hay que dar la vuelta al edificio... nos señalan con el dedo... pero empezamos a ir, y todo está vallado... veo de pronto la carretera que da la vuelta, y para allá que vamos... corriendo, con las maletas dando saltos, y corriendo como hacía tiempo que no corría... había perdido el control del tiempo, y solo lo volví a tomar cuando vi que Anabel no andaba, corría, y pensé que no sabía qué hora era...

Nuestra carrera era intensa, más de 200 metros sin parar... nos mirábamos, y nos alimentábamos de fuerza. Por fin algo conocido, donde nos dejó el bus. Hay un señor de seguridad en una caseta. Le preguntamos, si de allí sale la Navette, y nos dice que sí, que es gratis. Le preguntamos también que cuanto se tardaba andando, y el tio que sí, que era gratis, que para qué ir andando. Le decimos que el avión sale, ya... y el tio con que era gratis. Le preguntamos si hacía mucho que había pasado, por la frecuencia, y el tio que era gratis... dioooooooooooooosssssssssssssss....

De pronto una señora cerca, con el coche parado, la verdad es que después de preguntarle, fui consciente de la posición del coche. Le pedimos que nos acercara por favor a la terminal 1 que nos era muy urgente. La señora saca la cabeza por la ventanilla, y nos contesta medio histérica, que está perdida. Es cuando miré el coche, y lo vi entre dos entradas a un parking, pero en ... contra dirección, y cruzado, al estilo de lo que hacen los coches de policia cuando quieren interceptar a un delicuente... mejor desistir...

Qué hacemos ??? Corremos ??? Bufffff....Hacia donde...???

De pronto vemos taxis... corremos hacía ellos... bueno, volamos... Anabel les hace ver que tenemos prisas... la verdad, eran las once y media pasaditas... llega un taxi, y los otros conductores le dicen que él nos lleva, el conductor del nuevo taxi no se entera de nada... total que subimos las maletas corriendo, y lo cierto, es que el tío era primo de Alonso, Button, Alguersuari, Schumacher o Hamilton, porque volaba... cuando vimos la distancia que había entre las terminales, flipamos, corriendo hubiéramos tardado media hora......

Por fin, vemos un cartel de Iberia y de Vueling.... pareeeeeeeeeeeeeeeeee... pareeeeeeee aquí... dos barreras , se levantan y detiene el coche... 15 euros... flipando... qué hora era ?????

Podríamos llegar??
Perderíamos el vuelo ??

... mañana más...

Buenos días...

6 comentarios:

Asor dijo...

Por Diosssss, qué estressss, eso no puede ser bueno!! jajaja, bueno me alegro que esteis ya por aquí sanos y salvos, después de vuestra odisea!!.
http://www.youtube.com/watch?v=SFtHB4RevLM
Actores invitados.... Anabel y Pedro ;))

Cancer Lunatico dijo...

ASOR ...jajajaa... ya quisiera yo parecerme al Tom ese... bueno, en altura lo mismo sí, jajajaja...

Estamos aquí, pero como acaba ???

jajajaja...

Besitos guapa...

P. Lunatico dijo...

A mi lo que me sorprende, es tu capacidad de memorizar cada detalle, yo con los nervios, hubiera olvidado el equipaje, si no es que hasta a mi pareja, je je je.

Me alegra que ya estes aqui.

Priscila dijo...

A todos nos ha pasado algo asi, espero no perdieran el vuelo.

Anónimo dijo...

Todo empieza en santa paz, y has logrado estresarme, ja ja ja ja dinos que fue lo que sucedio, que la peli esta buena.

Anónimo dijo...

jejejeje, sin duda parece de película...

Besos!