viernes, 14 de mayo de 2010

Conversaciones pendientes... pareja en peligro...


Hace unas fechas estuve de escapada de fin de semana, ya que hoy en día, y con las ofertas que hay, te puedes montar alguna que otra escapada, sin grandes dispendios, y esta vez tocó Logroño, de la que ya puse alguna foto.

Fue una buena experiencia, ocho personas, 3 parejas y dos personas sueltas, la verdad es que relativamente, todo fue muy bien, pero eso, relativamente.

No hablaré del caso que nos ocupa, porque tampoco es necesario, pero sí que haré comentario de algo que he querido dejar pasar unos días, mejor dicho semanas, porque es un tema complicado, mucho, sobre todo para las parejas, y se trata de las "conversaciones pendientes" o como me gusta más llamarlo "conversaciones que no tuvimos".

Las he odiado siempre, porque acaban surgiendo, salen en el lugar más indiciado, y más controlado, pero ni mucho menos el más acertado.

Ahí, la mujer le da mil vueltas al hombre. Sí, sabe guardar más la compostura, es mucho más inteligente, y un poquito arpía, sabiendo callar, y solo soltar ese peso que lleva dentro, en el lugar que cree indicado y en el momento justo. Yo soy bastante así, por lo que me sé muy bien de lo que hablo.

Pero hay un problema, cuando esas conversaciones surgen, y en frente tienes un hombre que es medio mujer, entonces duele.

Solo recuerdo una vez en mi vida que tuve un dolor terrible, y ahora sí que hablo de mi. Hace muchos años, creo que fue una de las veces que más daño me hizo, y fue eso, una conversación pendiente, o mejor, una callada en un momento concreto, para días más tarde, y encontrando lo que parecía un momento mágico, soltarlo así, como si nada. Fue una tarde, mientras descasábamos en un sofá, relajados, viendo una película. Así, con toda la frialdad del mundo me contó unos detalles.

Para otro hombre, ese momento hubiera pasado sin más, pero yo no, yo también guardo aunque intento no sacar, porque tengo un defecto enorme, muchísima memoria, hasta fotográfica diría yo que es, por eso mejor no sacar. Pero aquel día todo fue una bomba. Días antes, habíamos tenido un problema, una duda, y se disipó de la manera más contundente del mundo. Si en ese momento hubieramos tenido esa "conversación pendiente", o mejor ubicado, la conversación que no tuvimos, entonces hubiera sido más liviano, sí, estaba en caliente, pero era el momento del diálogo. En cambio esa persona calló, y cometió un error gravísimo... coloco la conversación en la estantería de "pendientes"...

Es un error tener estas conversaciones en los momentos que creemos más adecuados, sobre todo si tu pareja es sensible, atenta, inteligente, y con muchas hormonas femeninas. Ten esas palabras cuando las tienes oprimiendo el cuello, cuando quieren salir, porque se dialogará, pero cuando lo guardas, y lo sacas un día con la cara de "que buena niña soy", entonces... zas... todo se derrumba...

En Logroño ocurrió... ella, una del grupo, soltó cosas que le quemaban en su momento, y tal vez, en presencia de más personas, pensó que era el momento adecuado, sin más, como si soltar aquello fuera solo eso, dejar ir ese peso... tal vez hasta relacionó la presencia de más personas, como la mitigación del derecho a la réplica, pensando tal vez que la discrección anularía la respuesta que no quería escuchar...

Pero la escuchó, y entonces todo se volvió gris, oscuro, liado, además el alcohol no ayuda, y la nube salpicó a otras personas, que sin querer sacaron palabras que creían que nunca saldrían, contagiadas de la situación, compartiendo un mal sabor en la boca, que en vez de desaparecer, se propagaba por el aire, contaminando la noche... y sí, ese fin de semana tuve una mancha... que pronto, entre todos, la borramos, pero las manchas siempre quedan, siempre están, ahora en el corazón de los que mucho queremos a nuestra buena amiga.

Por eso mi consejo es uno, las conversaciones pendientes, no se deben guardar y estudiar, para "tener" en el momento perfecto, no, o se sacan, o las guardas, pero no las "uses" nunca, porque solo harán daño, a no ser que tu pareja sea de esas personas que son capaces de vivir a tu lado, pero sin escuchar, entonces lo tienes de "puta madre", lo sueltas cuando crees, te quedas aliviada, y sigues tu camino.

No es mi mundo. No. Mi mundo es mucho más complicado, es el problema de formar una pareja especial, de las pocas que he conocido a este punto de mi vida. Una conexión muy fuerte, pero también es cierto que dos personas inteligentes, mucho, capaces, luchadoras, analizadoras, proyectantes, positivas, de intereses comunes, sólidas, con dudas, con miedos, pero compartidos y buscando el apoyo en el otro. Somos fuertes, pero junto al otro, y eso nos convierte en roca, dura e imperturbable.

Y ese es mi consejo, desechar esas palabras que no dijiste en su momento, no meterlas dentro para querer sacarlas, porque entonces saldrán, y la presión irá en aumento, subiendo cada vez más, aunque no lo creas, la ansiedad por buscar la salida, hará que esas mismas palabras busquen una velocidad endiablada, y cuando salgan, se clavaran como cuchillos.

Tienes dudas, pues pregunta. Tienes reproches, pues sácalos. Tienes amor, pues díselo. Porque si no, solo conseguirás un clima complicado, un aroma a herrumbre, que hinundará todo, y lo manchará... y las manchas nunca desaparecen...

Que tengáis un fantástico fin de semana...

P.D. Convertir las palabras de rencor, en melodías de amor, eso fomentará la ilusión, alimentará la sonrisa y os hará felices... en tu mano está...

4 comentarios:

Plas dijo...

Este post me ha "llegao". Me siento identificada pero aprendí la lección en su día: como no hablar en su momento puede cargarse una relación.

Por suerte, a veces, se cumple eso de "Más vale tarde que nunca" y si ambas partes tienen intención de hablarlo (sin ir a hacer daño) las cosas pueden arreglarse. Es más, pueden renacer con más fuerza y energía (y acabar en boda!).

Eso sí, todavía hay comentarios que te guardas y buscas cuando soltarlos, eligiendo sin querer siempre el peor momento... En fin! Hay que ir aprendiendo y entrenándose... Alguien me dijo una vez que una relación es como una carrera de fondo, hay que saber dosificarse.

Un beso

Anónimo dijo...

No siempre se tiene el valor de hablar en el momento, asi como no siempre se calla con la intencion de lastimar, algunas veces es necesario que el tiempo haga lo suyo para poder hablar.

Hay situaciones que simplemente desconocemos, y por esa razon, no debemos juzgar.

Solo mi muy modesta opinion.

Anónimo dijo...

No siempre se tiene el valor de hablar en el momento, asi como no siempre se calla con la intencion de lastimar, algunas veces es necesario que el tiempo haga lo suyo para poder hablar.

Hay situaciones que simplemente desconocemos, y por esa razon, no debemos juzgar.

Solo mi muy modesta opinion.

Anónimo dijo...

Lo has bordado!!

Resulta intimidador que seas siempre tan acertado.

Buen finde!
Besos!!